La silla Ant fue diseñada por Arne Jacobsen en 1952, y 70 años después es todo un ícono del diseño en plena vigencia.
Es una de las sillas más reconocidas del diseño industrial, y a 70 años de su creación sigue siendo valorada por su estilo y comodidad.
Desde su origen, en 1952, la Ant Chair ("silla hormiga" en su traducción al español) llamó la atención por su ingenioso y delicado diseño, con la elegancia de un instrumento musical.
Sin embargo, su forma se identificó a primera vista con la silueta de una hormiga erguida, con la cabeza levantada.
Su creador fue el danés Arno Jacobsen, y la silla Hormiga es uno de sus diseños más famosos, producido por la marca Fritz Hansen (www.fritzhansen.com) que hoy la sigue produciendo y comercializando para el interiorismo de hogares y equipamiento de oficinas.
La vocación original de Jacobsen fue la de pintor, y eso explica la precisión y detalle que tenían los dibujos de presentación de sus diseños, para los que empleaba acuarelas y otras herramientas propias de un artista.
La Ant Chair está hecha de nueve capas de chapa moldeada a presión. Es el secreto de la reconocida comodidad y resistencia de este asiento de madera laminada.
La silla Ant es reconocida como la primera silla apilable producida industrialmente.
Esto se debe a que, en su origen, la silla Hormiga fue una propuesta pensada para emplearse en la cafetería y cantina de la empresa farmacéutica danesa Novo Nordisk.
Además, se caracteriza por su ligereza, estabilidad y facilidad para trasladarla de un lugar a otro.
Cuando Arno Jacobsen diseñaba la Ant Chair una de sus prioridades, además de crear un asiento ligero, estable y fácil de transportar, fue “que los pies no se chocaran con las patas”.
Esta es la causa de que al principio tuviera solo tres patas, una seña particular de su diseño original.
Fritz Hansen lanzó una primera edición de la silla Hormiga de 300 ejemplares con patas de plástico.
Fue un boom inmediato y la producción en serie sustituyó las patas de plástico por tubos de acero.
El asiento creado por Arno Jacobsen tenía 3 patas, pero entre sus constantes actualizaciones, en 1971 al diseño original de la silla Hormiga se le añadió una pata más.
Tiene 70 años y desde su creción ha sido un modelo de asiento versátil y adaptable a diferentes estilos y tendencias de decoración.
Su diseño moderno y escultural y modo de uso simple y cómodo garantizaron una larga vida y vigencia a la silla Ant.
De hecho, en tiempos en los que las líneas curvas vuelven a mandar en el interiorismo, el elegante diseño de la Ant Chair vuelve a asentarse entre lo más nuevo y codiciado.
A tres décadas de la muerte del diseñador danés, sus creaciones que atravesaron el ámbito del diseño y la arquitectura -desde una cuchara para una cubetera a un edificio- siguen siendo una referencia del diseño danés y marcando tendencia.
El creador de la Ant Chair se caracterizó por la productividad y la calidad de sus creaciones, tan originales y atractivas como funcionales para la vida cotidiana.
Además de la silla Hormiga, Jacobsen creó muchos objetos íconos del siglo XX reconocidos por su elegancia atemporal y clásica.
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