En ese momento tan creativo en el desarrollo del proyecto, es clave formular y abrirse a inquietudes. La Licenciada en Administración de Empresas y magíster en negocios, Romina Ávila, comparte algunas estrategias para expandir las ideas.

"La ideación es la etapa en la que “echamos volar” la creatividad y en ese proceso la metodología del Design Thinking es muy útil porque brinda una herramienta sobre la cual podemos formular de soluciones ante los problemas o necesidades que nuestros usuarios tienen", comparte Romina Ávila, que es mentora de emprendedores y Pymes en temáticas que promueven la innovación y capacitadora en los cursos de Puro Diseño.

La herramienta integra la posibilidad de iterar: mientras se transita el proceso, se vuelve a las etapas anteriores para corregir las validaciones realizadas.

Y en este camino la formulación de preguntas es fundamental. Acá 5 de ellas elementales y muy potentes.

¿Cuán dispuesto estoy a salir de mi zona de confort?

El cambio de pensamiento permite dar origen a todo un proceso disruptivo que propone salir de lo conocido.

Es la única manera de crear. La idea es poder buscar en lo cotidiano y en naturaleza aquello que permita cambiar el modelo mental que hasta el momento nos acompañó.

¿Solo puedo idear si cuento con recursos?

De ninguna manera. La estrella del proceso es el cerebro. Podremos construir un prototipo con un dibujo, cartón o valiéndonos de nuestra palabra.

Para lograr grandes resultados hay que poner a disposición el tiempo que consideramos oportuno para analizar, idear, construir y volver para atrás en el caso de ser necesario.

¿Estoy dispuesto a interactuar con otras miradas radicalmente distintas a la mía?

La colaboración es la base fundamental para el resultado buscado.

Necesitamos tener la actitud de querer poner a disposición un saber y una experiencia propia para un bien colectivo. La clave está en pensar al “otro” como destinatario.

¿Cuál es el grado de conocimiento de las necesidades de los usuarios y beneficiaros de mi idea?

Cuanto más conozco a mi cliente, más chances tengo de acertar. Las distintas técnicas, como el Mapa de la Empatía permiten analizar los comportamientos, pensamientos, dichos aspiraciones y frustraciones de los usuarios con respecto al problema que necesitan resolver.

Cuanto más sepamos de ellos, menos riesgo tendremos al momento de pasar a la fase siguiente (prototipado de soluciones)

¿Cuán importantes son las técnicas de creatividad a la hora de idear un producto?

Muy. Las distintas técnicas nos permiten salir de la zona mental de confort.

A partir de diferentes herramientas y estrategias impulsamos al cerebro a que trabaje distinto: lo llevamos a una especie de gimnasio mental.

Cuanto más dispuestos estemos a transitar esta etapa, mejor: vamos a sorprendernos de lo que somos capaz de idear, en lo individual y en conjunto con otros.

¿Empezamos?