Imposible no sentir empatía y ponernos en el lugar de quienes viven en la calle durante los días más fríos del año. Es lo que hizo un colectivo multidisciplnario de Ulm, Alemania, que desarrolló cápsulas para refugiar a personas sin hogar durante el invierno.
Se llaman “Ulmer Nest” y se instalaron -como prueba piloto- en parques y otras áreas frecuentadas por las personas sin hogar en esta ciudad alemana, 120 kilómetros al oeste de Múnich.
Ulmer Nest: símbolo del diseño con empatía y solidaridad
Parecen de película, pero nada más real que saber que en Alemania y en todo el mundo, hay millones de personas sin hogar para quienes los meses de invierno, con las temperaturas más bajas del año, son los más difíciles de sobrellevar.
Los refugios conocidos como “Ulmer Nest” (“nest” es “nido” en inglés) están construidos con madera y acero, y fueron diseñados con un efectivo aislamiento térmico, para proteger a las personas del frío, el viento y la humedad.
Cada módulo está equipado para alojar hasta dos personas (o una persona más una mascota o equipaje) y garantiza la circulación de aire fresco en su interior.
El primer prototipo fue presentado en 2020, y en la actualidad, el proyecto de las cápsulas Ulmer Nest sigue en desarrollo y con mejoras recientes, como la incorporación de paneles solares y una conexión sin necesidad de redes móviles.
Los mecanismos de cierre y bloqueo de las cápsulas también se han actualizado para facilitar su uso.
El creador de las Ulmer Nest es el diseñador Flaco Pross, que de ideó estos refugios de manera independiente, y sus usuarios no necesitan realizar ningún trámite ni registro para acceder a las cápsulas.
“La tecnología puede y debe ser la herramienta ideal para ayudar a las personas a cumplir desde las tareas más básicas en el día a día, como el mecanismo que nos permita poder afrontar situaciones menos cotidianas de la manera más tranquila posible”, se define al Ulmer Nest en su página web.
“Ayudar forma parte de nuestro ADN y este producto o servicio permite que la innovación sea el método ideal para echar una mano a los más necesitados”.
Cómo funciona Ulmer Nest: las cápsulas para refugiar a personas sin hogar
El proyecto es una colaboración entre un grupo de emprendedores, con sede en la ciudad de Ulm, con experiencia en el diseño y desarrollo integral de productos y soluciones.
Hasta el momento, existen solo dos unidades del Ulmer Nest. Son prototipos hechos a mano y, según expresaron sus fabricantes, “es una medida de último recurso, no una forma más de vivienda. No es la solución ideal para la gente sin hogar, pero es una ayuda más en momentos de gran necesidad”.
Para su fabricación, tuvieron en cuenta el uso de un material noble y accesible, fácil de trabajar y renovable, como la madera, teniendo en cuenta que, tratada correctamente, resiste condiciones climáticas adversas.
Video: qué son las Ulmer Nest, las cápsulas para refugiar a personas sin hogar
Solo en el interior de los Ulmer Nest hay tecnología aplicada, como sensores de temperatura, humedad, humo y CO2, además de la monitorización del cierre de la puerta.
También poseen una señal de alarma acústica y un sistema de ventilación, todos con capacidad para conectarse a la unidad de control central. Y para mantener el interior con aire fresco, hay un intercambiador de calor, con un elemento cerámico, que permite que la temperatura se mantenga, e incluso que aumente.
Se calcula que en Alemania, hay 860.000 personas en situación de calle, y estas cápsulas que desde 2020 funcionan como parte de un proyecto piloto, y los “nidos” de Ulmer Nest podrían comenzar a distribuirse en toda Alemania.
Las cápsulas no pretenden ser un hogar alternativo, sino un alojamiento de emergencia. Pero el equipo de fabricantes advierten sobre efectos positivos más allá de la función para la que fueron creados.
“Hemos visto algunos efectos que jamás hubiéramos imaginado, como que los vecinos proporcionen a los huéspedes té caliente por la mañana y cosas así”, contó Florian Geiselhart, diseñador informático y parte del equipi de Ulmer Nest. Y destacó que su proyecto fue bien recibido y apoyado por las autoridades de la ciudad.
En su página web aclaran: “Desafortunadamente, actualmente no podemos producir ni vender más nidos de Ulm. Estamos en el proceso de evaluar las posibilidades de optimizar la producción en cuanto a materiales, manipulación y procesos productivos hacia un tipo de producción en serie”.
Y agregan: “No hay instrucciones ni planos de autoconstrucción disponibles, ya que los prototipos actuales aún se están evaluando y revisando casi a diario, lo que significa que los planos publicados tendrían que revisarse”.
Más información: purodiseno.lat