La mitad del año ya pasó y las metas que nos propusimos al principio de la temporada nos miran… ¿Y si empezamos ya mismo a poner en marcha ese nuevo proyecto?
Hacer algo por primera vez a veces no es tan fácil como cuando éramos chicos.
Con el tiempo, esa habilidad parece haberse perdido. Pero solo parece, porque enfrentar el temor a lo desconocido y sobrellevar la ansiedad de probar hacer algo por primera vez es un desafío que tenemos que saber asumir. ¡Y disfrutar en el intento!
Mirá estas tips y consejos para intentar poner en marcha un proyecto y algo nuevo antes de que se vaya el año.
Sin prisa pero sin pausa ¡y para siempre!
Por supuesto que hacer cosas por primera vez provocan cierto temor y la tendencia es adelantarnos a lo negativo de la experiencia y a lo que nos pueda suceder de malo.
Pero lo importante es que, con otra mirada, la misma situación puede ofrecernos la posibilidad de ver todo lo positivo que puede suceder, y enfocarnos hacia el próximo paso con esa (nueva) perspectiva.
Al temor a lo desconocido y la inmediata protección que buscamos en lo conocido hay que desafiarlo con una nueva actiud: para progerte, nada mejor que actuar e intentar.
Cuando la incertidumbre por lo que nos puede suceder nos inmoviliza, es el momento de soltar lo que creemos que tenemos bajo control y salir a descubrir y experimentar un nuevo plan.
De eso se trata intentar. Más que un impuslo, es una fuerza emprendedora que se impone al miedo a que las cosas no funcionen, que no le importa “el fracaso”, que vaya hacia lo desconocido sin detenerse en mirar hacia atrás ni atender a historias negativas del pasado.
Crear algo nuevo alrededor nuestro es parte de nuestro proceso de crecimiento personal y profesional.
Imposible pensar en algo más positivo para nuestra realización y bienestar que poner en marcha aquello que creemos que será mejor para seguir adelante.
Poco a poco, tenemos que soltar el control de lo que venimos haciendo ¿Y qué? No está mal dejar de tener el control de todo, ser más flexibles y exponernos a lo nuevo, volver a aprender, paso a paso, pero con convicción, seguridad y confianza.
Y la palabra clave en el proceso es… ¡motivación! Es el impulso para poner en marcha un proyecto, y eso es parte del logro más allá de los resultados.
La motivación es el alimento de la acción, día a día, y la fuerza detrás de un arduo trabajo para llevar adelante un proyecto.
Foto destacada: Miguel Bruna/Unsplash.
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