Desde chicas, las hermanas Sofía y Soledad Cassotto supieron que en algún momento de sus vidas iban a emprender en el mundo de la moda. Les gustaba mucho intercambiar prendas y seguir las tendencias.
Y a pesar de que una se recibió de contadora y la otra de psicóloga, en marzo de 2018 lanzaron su proyecto de indumentaria. La oportunidad, claro, no llegó mágicamente: fue después de muchos meses de análisis.
"Evaluando el mercado y nuestros propios guardarropas, nos dimos cuenta de que había una profunda ausencia: medias con diseño. En las grandes ciudades de Europa y Estados Unidos, por el contrario, ese accesorio se estaba convirtiendo en una parte fundamental del outfit femenino", comparte Soledad.
Con esa certeza, ampliaron el equipo (sumaron a la diseñadora de indumentaria Belén García) y se pusieron a pensar en el desarrollo de una marca que innovara en el mercado. "Veíamos que había una demanda insatisfecha y súper explotable", cuenta Sofía.
A hora de diseñar, intentan lograr modelos únicos, exclusivos y que aporten un valor agregado al look como lo haría cualquier otro accesorio.
Sofia: le aconsejaría que se anime, que hay oportunidades a la vuelta de la esquina y que no hace falta crear algo que no existe para iniciar un proyecto. Se puede mejorar algo que ya existe dándole un valor agregado o incorporar productos o servicios que se venden en otros países y adaptarlos al mercado local.
Además es muy importante tomarse el tiempo necesario: no solo para pensar la idea sino para desarrollarla en todos sus aspectos. Nosotras siempre recomendamos el uso del modelo Canvas porque ayuda a conocer lo indispensable para saber si tu idea tiene una demanda, cuál va a ser tu público objetivo, si es potencialmente rentable, los recursos que necesitás para llevarla a cabo y los medios para vender y difundir lo que querés.
En la actualidad no vendemos productos o servicios sino experiencias así que es muy importante que el esfuerzo y la pasión se noten en tu marca. En algún punto, todo depende de uno.