El artista multidisciplinario norteamericano vuelve a sorprender con un proyecto en el que imaginó (y hace realidad) cómo serán los súper autos de hoy dentro de varios siglos, cuando sean restos arqueológicos.
El artista Daniel Arsham es un aficionado a los automóviles. Y lo exhibe a su manera: sorprendiendo con un proyecto en el que imagina (y materializa) cómo serán los más cotizados autos de la actualidad cuando se conviertan en restos arqueológicos, varios siglos más allá del presente.
Daniel Arsham volvió a ponerse el traje de gran ilusionista, y entre todas las disciplinas en las que se destaca, sacó a relucir sus habilidades como artista y diseñador. En este caso, de cuatro coches icónicos hechos en tamaño real.
El artista, arquitecto y diseñador que afirma que su misión es “cambiar la percepción” -de los espacios y las cosas- empleó materiales geológicos, como selenita, cuarzo, pirita, ceniza volcánica y amatista, para construir su autos arqueológicos.
A todos estos materiales naturales los manipuló para que adquirieran un aspecto erosionado, y así poder cumplir su objetivo de mostrar cómo podrían ser estos coches hoy de lujo en varios siglos, convertidos en piezas arqueológicas.
La flota de “autos de piedra” de Daniel Arsham -coches de alta gama envejecidos y erosionados- son protagonistas de la exhibición “Arsham Auto Motive” en el Petersen Automotive Museum de Los Angeles, hasta el 26 de noviembre.
Arsham reprodujo un Ford Mustang GT Fastback de 1968, el Porsche 356 Speedster de 1955, una Ferrari de 2018 y otro Porsche 911 -de 2022- fosilizado de calcita azul.
Para la muestra, Arsham también creó carteles y esculturas temáticas, como un letrero de BMW y un tanque de gasolina deteriorada por el tiempo.
El artista multidisciplinar (recientemente cofundó el estudio de arquitectura Snarkitecture junto con Alex Mustonen y también tiene su propia marca de moda, Objects IV Life) imaginó qué pasaría si estos coches que hoy admiramos en las calles de las ciudades del siglo XXI, son desenterrados y descubiertos durante una excavación, en algunos siglos más.
Así, el diseñador que sobresalió por sus colaboraciones con Dior, adidas, Tiffany y Uniqlo, entre otras compañías, llevó adelante una sorprendente transformación de autos deportivos de lujo que enloquecerían a un aficionados a los automóviles del futuro.
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