La producción dirigida por Cecilia Kang lleva dos meses agotando localidades en la sala de cine del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires. Puro Diseño conversó con Delfina Peydro, la diseñadora que contó en una sola y sugestiva imagen la esencia de un film de título largo e inmensa proyección.
Seúl-Mar del Plata-Buenos Aires. Son las tres estaciones clave del viaje de “Partió de mí un barco llevándome” de Cecilia Kang. Ganó el Premio Especial del Jurado y el Premio del Público del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata en 2023, y acaba de empezar su tercer mes de funciones (agotadas) en el MALBA (Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires).
Algoritmo o Azar. “Partió de mí un barco llevándome” (@partiodemi) empieza a estar en todas partes; se recomienda -boca a boca-, el tráiler en las redes sociales transmite su sensibilidad en un minuto, y el póster diseñado por Delfina Peydro refleja la emotiva y dramática historia que está por empezar a contar en una imagen, tan simple como reveladora.
En el afiche de “Partió de mí un barco llevándome” creado por Delfina Peydro, una mujer joven -de rasgos orientales, con anteojos redondos- eleva su mirada, provocando un destello blanco por el sol, en la parte superior del lente izquierdo.
La imagen del póster tiene el aspecto de una fotografía serigrafiada, granulosa, en tonalidades azules, más o menos degradadas, desde la parte superior -por encima de la cabeza de la figura- hasta abajo, cuando se rompe como un papel rasgado para dejar lugar a la zona del título de la película: “Partió de mí un barco llevándome”.
Pero volvamos a empezar por el principio de la película dirigida por Cecilia Kang, guionista y directora, hija de coreanos, premiada en el Festival de Cine de Mar del Plata, que llenó la Sala Lugones del Teatro San Martín, y que ahora es la peli indie sensación de los sábados por la tarde en el MALBA, y “un barco…” también llegó a Córdoba y Rosario.
Melanie es una joven actriz argentino-coreana, convocada para interpretar en un monólogo el testimonio de una “comfort women”. Así llamaban a las mujeres que durante la Segunda Guerra Mundial fueron utilizadas como esclavas sexuales por el Ejército Japonés.
Melanie es la joven del póster de “Partió de mí un barco llevándome”, y la imagen sugiere sus emociones cruzadas, mientras se prepara para el papel y vive su vida cotidiana, adentro y afuera.
Es lo que “explica” -sin palabras- el póster de Delfina Peydro, sintetizando el largo título del film, inspirado en un texto de la poeta argentina Alejandra Pizarnik: “explicar con palabras de este mundo que partió de mí un barco llevándome”.
Y lo que cuenta su autora a Puro Diseño es la historia detrás del póster de “Partió de mi un barco llevándome” y cómo se hizo.
“Primero Cecilia Kang me pidió que componga el soundtrack de su película”, cuenta Delfina, que no tardó en recibir por parte de la cineasta la doble tarea de concebir la música y el diseño del afiche oficial.
“Estaba en Villa La Angostura de vacaciones y no podía parar de pensar opciones”. Y en su búsqueda y exploraciones, se fusionaron herramientas y elementos sonoros y visuales. Photoshop, un Mellotron y sintetizadores.
“Había una escena que me había cautivado mucho”, recuerda Delfina Peydro: la protagonista mirando los árboles y el reflejo de la luz sobre sus anteojos. “Demasiado bello -resume- La música tenía que acompañar semejante imagen. Y cuando llegó el momento del afiche, si bien pensé en varias opciones, definitivamente ese era el momento”.
Como la directora quería una ilustración y no una fotografía para el póster de “Partió de mi un barco llevándome”, Delfina tuvo que “esconder la foto”, inspirándose en la estética de los fanzines. “La película tiene una ternura que no podía no reflejarse en su afiche… Tenía que ser coherente y resonar sensiblemente con el universo de la película”.
La imagen en Spotify del soundtrack oficial de “Partió de mí un barco llevándome” compuesto por Delfina Peydro es Melanie mirando al cielo con destellos, en blanco y negro y grises.
De padre publicista y pintor, cuando era chica los libros más grandes que “leyó” Delfina Peydro fueron los voluminosos catálogos de los bancos de imágenes, con capítulos/categorías titulados “money”, “machines” y “food”.
“Desde que tengo memoria, siempre fui ´la creativa´ -rememora- Era la que dibujaba y la que de muy chica tocaba instrumentos”.
Primero hizo música, y al diseño llegó desde el dibujo y la ilustración. “Pintaba con plumín y acuarelas… Una técnica que usaba mi abuelo paterno, ilustrador de publicidad en ´la época Mad Men´de Buenos Aires, a quien nunca conocí pero siempre admiré”, destaca Delfina Peydro.
Más adelante, hizo cursos con Miguel Rep, incursionó en la literatura infantil bajo la influencia de Dr Seuss, Maurice Sendak (autor de “Dónde viven los Monstruos”) y Quino. Y después se dedicó al diseño (con banda sonora incluida).
“Me empecé a dedicar al diseño gráfico casi que sin saberlo -confiesa- Armaba flyers para mis bandas, Dos Ossos y El Asesino del Romance (banda que comparte ¡con Cecilia Kang!)”.
Delfina Peydro comenzó a trabajar como guionista en una productora de vídeos institucionales y sociales, lo que la llevó al plano de la animación.
Actualmente, Delfina Peydro es directora creativa de una agencia, música y diseñadora.
“El diseño para mí es una forma de plasmar lo que yo siento y pienso -afirma- Lo que más me entusiasma de ese mundo es poder concretar la visión de algo, que resulta mental y al mismo tiempo muy sentimental”, asegura.
Algo de Todo eso ocurrió al realizar Diseño y Música de la película documental “Partió de mí un barco llevándome”, una producción de Martín Rodríguez Redondo (@martinrodred) y Cecilia Kang (@misbelovedones)”, junto con Yeo Siew Hua, con guión de Virginia Roffo.
El barco parte todos los sábados, a las 18, en @museomalba
Más información: purodiseno.lat