Así fue: el rapero Tommy Cash le contó a Adidas su deseo y la marca intentó hacerlo realidad: quiero tener las zapatillas más largas del mundo. ¿Qué tal?.
Un tiempo después (nada, ¡5 meses!) acaban de presentar en conjunto un diseño único: la misma puntera de plástico de las clásicas Superstar pero con 40 ojales atados con cordones XL.
Las repercusiones fueron instantáneas: algunos seguidores las compararon con los zapatos de payaso, otros con una enorme y suculenta baguette hasta alguien le encontró una funcionalidad muy oportuna en tiempos de distanciamiento social.
La paleta de tonos elegida no es casual: la zapatilla derecha es completamente blanca y la izquierda, negro azabache.
Cada zapatilla se basa en una paleta monocromática inspirada en el antiguo concepto chino del Yin y el Yang, con dos fuerzas opuestas pero complementarias. Juntas formas un todo.
Controvertidas, diferentes, el diseño está dando que hablar.
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