Además de un artista, Benjamin Everett es un fotográfo pictórico y autodidacta enorme. Como si fuera un pintor transforma los paisajes en obras surrealistas. Se define así mismo como un artista viajero
Estudió Bellas Artes pero también arquitectura y diseño gráfico antes de incursionar en la fotografía digital.
Se dejó influenciar por la música electrónica y los deportes al aire libre, especialmente el surf y el esquí.
En sus paisajes híbridos mezcla las tradiciones de la fotografía y la pintura. Captura sus imágenes en distintos viajes alrededor del mundo y genera diferentes experimentaciones.
Elige ubicaciones únicas que se prestan al juego creativo y establece recurrencias de luz, forma, color y composición.
Busca capturar un estado de ánimo especial.
Por sus paisajes espectaculares, en 2018 recibió el prestigioso premio Hasselblad Masters Award. Sus obras transmiten poesía: Desde el telar de la tierra, escribió bajo esta fotografía que posteó en IG donde lo siguen más de 459K personas.
"El poder y el drama de la naturaleza" lo inspiran. Le encantan los lugares salvajes. En ellos se instala con su lente para mostrarles al mundo estas imágenes poderosas e inspiradoras.