La arquitecta, artista y diseñadora francesa realizó un “portal al futuro” a todo color que transforma la entrada del Googleplex, en California. Conocé a su creadora y de qué se trata su concepto clave; "shikiri".
“Mirage” de Emmanuelle Moureaux es una instalación vibrante y sensorial que transforma la entrada del campus central de Google en California.
La arquitecta y artista francesa combinó color, escala y emoción en una obra que celebra la diversidad, la imaginación y el poder del diseño como lenguaje universal.
Una escultura de 100 colores da la bienvenida al universo Googleplex.
La instalación diseñada por Emmanuelle Moureaux es una obra monumental que llevó cinco años de trabajo y planificación minuciosa, y acaba de consagrarse como una de las obras más icónicas del Googleplex, la sede central de Google en California.
Concebida como una serie de esculturas de bienvenida, se trata de tres estructuras monumentales que abrazan a los visitantes con 60 metros de color en 100 tonos vibrantes, que parecen flotar en el aire.
La instalación no solo da la bienvenida sino que es una invitación a imaginar y a vivir la experiencia de una inmersión en el universo y espíritu de Google.
La escultura y el nombre de la obra de Emmanuelle Moureaux se inspira en el número matemático "googolplex" —un 1 seguido por un número casi infinito de ceros—, y reproduce esa idea mediante capas tridimensionales de círculos superpuestos, representando la abundancia, la diversidad y el dinamismo de la empresa tecnológica.
Cada uno de los 100 tonos fue elegido para transmitir sensaciones, conectar con la emocionalidad de quienes ingresan al campus y celebrar la diversidad de personas, ideas y culturas que conviven dentro de Google.
El resultado es una experiencia inmersiva que transforma lo cotidiano —una entrada de edificio— en un gesto artístico, arquitectónico y profundamente humano.
Nacida en Francia en 1971 y radicada en Tokio -desde 1996- Emmanuelle Moureaux es una de las voces más originales de la arquitectura y el diseño contemporáneo.
En 2003 fundó su estudio Emmanuelle Moureaux Architecture + Design y desde entonces ha desarrollado una obra singular que cruza arte, arquitectura y diseño con un factor común: el color como protagonista absoluto.
Inspirada en las calles de Tokio y los elementos tradicionales japoneses, como las mamparas corredizas, creó su propio concepto de diseño llamado “shikiri”.
A través de él, compone espacios tridimensionales usando el color como material estructural.
Entre sus trabajos más destacados se encuentran la serie “100 colores”, las instalaciones para UNIQLO e ISSEY MIYAKE, el diseño de las sucursales del banco Sugamo Shinkin, y el proyecto urbano de 14 km de la Línea Circular del Metro de Nuevo Taipéi (Taiwán).
En 2017, presentó una monumental instalación llamada “Bosque de Números” en el Centro Nacional de Arte de Tokio.
Es profesora en la Universidad de Arte y Diseño de Tohoku y dirige el “100 Colors Lab”, donde estudiantes exploran el potencial expresivo del color con objetos cotidianos. Además, es miembro del Instituto de Arquitectura de Japón y ha recibido múltiples premios internacionales por su enfoque sensible e innovador.
Shikiri es el concepto que define toda la obra de Emmanuelle Moureaux. Y asó lo explica ella misma en su página web.
“Utilizo los colores como elementos tridimensionales, como capas, para crear espacios, no como un toque final aplicado a las superficies”,
Esa idea es la base de su concepto central: shikiri, una palabra inventada por ella misma que significa “dividir (crear) espacio a través del color”.
La idea nació durante su primera visita a Tokio, cuando quedó fascinada por el caos colorido de la ciudad: carteles superpuestos, cables aéreos, cielos fragmentados.
Para ella, todo eso generaba capas visuales que construían una profundidad distinta, vibrante y emocional.
Desde entonces, “la misión” de la arquitecta y diseñadora es trasladar esa sensación al diseño espacial. Y lo hace a través del shikiri, un enfoque que le permitió transformar desde una silla hasta un edificio entero, utilizando el color como recurso estructural. No como un maquillaje, sino como el alma misma del espacio.
En su serie “100 colores”, cada instalación invita a sumergirse en un espectro cromático completo. Su objetivo: que el público no solo vea los colores, sino que los sienta, los toque, los atraviese. Que se emocione con ellos.
“Los efectos desbordantes del color en el espacio demuestran que los colores pueden brindar más que un entorno: pueden generar una conexión humana”, asegura.
Entre los galardones más importantes recibió Emmanuelle Moureaux se destacan: Good Design Award (Japón) por su trabajo en la Línea Circular de Nuevo Taipéi; Design for Asia Award (Hong Kong); iF Design Award (Alemania); Architizer A+ Award por “100 Colors”, y Wallpaper Design Award* por su enfoque innovador del color.
Su útlima obra, “Mirage” en el Googleplex, no es una simple obra decorativa: es una declaración de principios, una celebración del color como lenguaje universal, y una invitación a repensar el modo en que vivimos y percibimos los espacios.
Así, en tiempos donde la tecnología avanza a pasos agigantados, obras como la de Emmanuelle Moureaux nos recuerdan que la emoción, la belleza y la sensibilidad son también parte esencial de la innovación.
Más información: purodiseno.lat