Súper estéticos y originales, estos enchufes de concreto son una opción muy tentadora frente a los plásticos existentes.
Es una idea de la marca húngara Sekhina y es muy innovadora.
La marca lanzó una serie de cubiertas para interruptores y enchufes de hormigón trabajado con distintas técnicas y disponibles en diferentes colores y texturas.
Cada pieza tiene un diseño único, con varias burbujas y marcas en su superficie como resultado del proceso del modelado
El material, por supuesto, tiene las características necesarias para cumplir la función. El concreto tiene propiedades aislantes eléctricas y no inflamables. Además están libres de resinas sintéticas y contaminantes.
La marca usa un hormigón uerte, duradero y resistente. Para lograr una superficie repelente al agua, evitar manchas de grasa y que se puedan limpiar, se los impermeabiliza.
Por ahora, la producción es a menor escala, pero el objetivo de los diseñadores es aumentar progresivamente la cantidad.
Por eso, también desarrolló una serie de superficies pulidas de estilo terrazo en varios tonos, incluyendo rosa pálido, verde y azul. El pulido, además, le da un acabado mate.
El cemento es un material de lo más versátil para crear.
El estudio de diseño Bower desarrolló una silla en la que el cemento se derrama como si fuera crema y la arquitecta Paula Rodríguez hace piezas de lo más variadas con el material: https://www.purodiseno.lat/en-primera-persona/la-arquitecta-que-se-dejo-tentar-por-el-cemento/