En el evento Nº1 de diseño e interiorismo internacional, el diseñador industrial egresado de la UBA recibió la Mención Rong Design Award. “Tenemos que poder resolver nuestras necesidades de una forma intuitiva, fácil y cuidando el planeta”, expresó Joaquín Sansone en una charla exclusiva con Puro Diseño.
Y el ganador es… Joaquín Sansone. El diseñador argentino acaba de recibir en el Salone del Mobile de Milán, Italia un premio internacional: la Mención Rong Design Award.
Es un premio destinado a los talentos emergentes, y en particular a los proyectos con visión de sustentabilidad, esencia artesanal y bajo la consigna de la investigación alrededor de los nuevos hábitats en el siglo XXI.
Joaquín Sansone recibió la Mención Rong Design Award en el Salon Satelllite de la Feria de Milán entre cientos de diseñadores sub-35. Y la distinción incluye una beca para hacer un curso intensivo en la Rong Design Library, en Hangzhou Yuhan, China.
“La Rong Design Library es un estudio que, además de trabajar con grandes marcas internacionales, creó una ´librería de materiales´ que toma, investiga y evalúa resultados, para crear una especie de base de datos de materiales con los que luego uno puede trabajar”, explica Sansone sobre la relevancia del premio que acaba de recibir y que le permitirá trabajar con estos recursos, durante un mes en China, investigando y desarrollando un proyecto personal.
“El descarte no es tal hasta que lo decidamos”, afirma Joaquín Sasone. Y sigue: “De esta manera, se crea un nuevo modelo de negocio, sustentable, con materia prima de calidad y prácticamente a costo cero, para dar solución a la gestión del desperdicio, y nuevas oportunidades de crecimiento o fidelización de clientes”.
“Quiero desarrollar una idea rectora, y encontrar soluciones en forma de productos o familia de productos, o de nuevas metodologías de trabajo”, se entusiasma Joaquín.
Un banco de junco hecho con fibras naturales del Delta de Tigre, un artefacto de iluminación de cuarzo y anteojos formaron parte de la colección Spinoff Material que Joaquín Sansone llevó a Milán.
El diseñador argentino llegó a la máxima cita del diseño mundial desde Mallorca, España, donde vive desde hace algunos meses
“El banco de junco surge de la investigación del material, después de aplicarle diversos procesos para ver qué reacciones tenía, su comportamiento y virtudes”, cuenta Joaquín Sansone a Puro Diseño.
Y recuerda que desde chico disfrutó de “juegos como diseñador”. “Pasé por todo tipo de actividad creativa gracias a mi madre, que me llevaba a todos lados”, y menciona cerámica, caricatura, teatro, artes plásticas, entre otras actividades.
En particular regrese a su mente un juego que compartía con sus amigos del Club Comunicaciones. “Armábamos casas con cualquier cosa, y lo llamábamos Rupiclub. Me acuerdo que una vez construimos una casa con cajones de cerveza como paredes. Y en mi casa, todo el tiempo estaba desarmando e intentando armar o arreglar o mejorar algún juguete o artefacto”.
Así, dos décadas después de que Joaquín Sansone construyera con palitos de helado un “mensajero” para avisarle a su mamá a qué hora despertarlo, un banco hecho con juncos naturales le concedió una preciada distinción en el mundo del diseño.
“Probé diferentes tipos de procesos, como la compresión; quería probar si flotaba o no, y qué le pasaba con un pegamento o si se pintaba… hasta si era o no conductor eléctrico. Y cuando le apliqué una compresión, me di cuenta de que tomaba mucha resistencia, y a partir de esa resistencia empecé a diseñar diversas propuestas. Ya no como productos sino como propuestas para poder a partir de eso diseñar algo”.
Joaquín Sansone desarrolló varias opciones morfológicas con esta virtud como eje central. “Hice un objeto pequeño que soportaba mi peso, y decidí dimensionarlo mas grande, y diseñar un banco, con tres patas que se unen en la parte superior. Creando de forma simple, un objeto funcional, disruptivo por su materialidad, sin estructura, que toma fuerza y soporta fácilmente a una persona sentada, incluso a dos”.
El proyecto “Spinoff Material” premiado en Milán es un desarrollo que Joaquín Sansone cuenta que terminó de moldear con su “amigo creativo”, Tomás Megna.
“Siempre estuvimos conectados en la creatividad, así que me junté con él para terminar de darle forma, y metodizar este concepto”.
Así lo explica: “El Spinoff trata de resignificar el material, apoyándonos en el conocimiento del que lo utiliza como materia prima, para crear nuevos productos que aprovechen y potencien sus virtudes”.
Sobre su proceso creativo, dice: “Es bastante ecléctico. Por ejemplo, con los productos que presenté en el Salón Satélite de Milán, el punto de partida fue el material: investigarlo, entenderlo y crear morfologías adecuadas a sus características, para luego encontrar el producto”.
Joaquín Sasone explica que, otras veces, la clave de su proceso creativo resulta una “solución” que, de alguna manera -espontáneamente-, surge: “veo o pienso, la dibujo y queda ahí, hasta que la sigo procesando y la voy moldeando mentalmente, haciendo cambios, pensando distintos materiales y formas”.
Además del sorprendente banco de junco, el diseñador argentino llevó a la Feria de Milán otras dos piezas: una luminaria de cuarzo (Silestone) y gafas de alumino compuesto.
“Nacen bajo el mismo concepto de resignificación de material -cuenta Joaquín Sansone- Son dos materiales de alta calidad, en cuanto a su acabado y características técnicas, y tienen en común que son materiales pensados para un solo uso puntual: la placa de cuarzo es un elemento fabricado para hacer mesadas de cocinas, y el aluminio compuesto es una placa creada para hacer fachadas y revestimientos”.
El descarte de este material es el que Sansone toma y resignifica como nueva materia prima para crear nuevos productos. “Hablo de resignificacion, porque adopto estos materiales por sus virtudes, para crear nuevos productos en base a estas cualidades”.
De esta manera, realiza objetos sustentables y de alta calidad desde su materia prima. Y, otra vez, el descarte y lo que hacemos con él es la clave de su trabajo.
“El descarte no es tal hasta que no lo decidimos nosotros como productores -repite Joaquín Sansone casi como un mantra de diseño- De ahí nace el concepto de Material Spinoff, ordenando y metodizando una nueva forma de crear valor a partir de materiales utilizados en la industria. Tomando los procesos productivos y el conocimiento sobre estos materiales que tienen los principales usuarios, para generar nuevos productos, y así nuevos modelos de negocio para ellos”.
Para él, el material es fundamental, el punto de partida, en el desarrollo de una idea. “El proceso de diseño puede partir de querer crear un producto. Por ejemplo, una mesa. Y a partir de eso se toman decisiones morfológicas y tecnológicas para llegar a ella”.
Y apunta el suyo: “Otro camino, el que yo tomé con mis productos, es partir del material, investigarlo, resignificarlo y volver a ponerlo en valor, para realizar nuevos productos que potencian sus virtudes. Morfológicamente, resolviendo productos que acompañen la naturaleza formal de los mismos, teniendo en cuenta su volumetría, linealidad o planaridad.
Joaquín Sansone es diseñador industrial, recibido en la Universidad de Buenos Aires. Fue ayudante de cátedra en la materia Morfología y estudió diseño UX/UI como una forma de adquirir nuevas metodologías de trabajo, y abordar el mundo digital.
“Siempre me interesó formarme. Por eso hice cursos de diseño de autos, de motos y diseño 3D”.
Joaquín Sansone trabajó en pymes argentinas y en diseño de mobiliario y de interiores, siempre teniendo en cuenta los conceptos de sustentabilidad, “descarte” productivo y atemporalidad.
“Como diseñador, trato de basarme en el sentido común y quiero que mi producto realmente resuelva algo -sintetiza- Simpleza morfológica y constructiva es otro punto importante para mi. Simpleza en el sentido de encontrar o crear el diseño necesario para el producto que busco”.
Joaquín Sansone está convencido de que la función (misión) del diseñador es “crear o mejorar elementos para que la vida de las sociedades sea mejor”.
“Tenemos que poder resolver nuestras necesidades de una forma intuitiva, fácil y cuidando el planeta. Tras la pandemia se entendió que los espacios que habitamos son medios que nos afectan emocionalmente. Por eso, rodearnos y armar un lugar acorde a nuestras necesidades nos ayuda a vivir mejor”.
¿Quiénes son tus referentes en la profesión?
Me gusta la forma de crear, pensar y desarrollar los objetos de Philip Stark, Francisco Gómez Paz, Horacio Pagani y Dieter Rams. También soy muy fan de las startup o de emprendimientos que van encontrando el camino y desarrollando productos geniales, como Facu Moro de Chilly o Agusto Mustafa de Elepants, y marcas como Hawkers o Nuyi.
¿Cuáles son tus objetos de diseño favoritos?
El exprimidor de Philip Stark, por cómo te interpela como producto, la simpleza de lo funcional y morfológico. El sillón BKF, por sus contraposición constructiva, una idea tan marcada en su dualidad. Y la lámpara arco de los hermanos Castiglione: simple, delicada y robusta, en un mismo producto.
¿Hay algún objeto de diseño que te hubiera gustado que sea creación tuya?
No sé si alguno puntual, pero sí me gustaría diseñar algo tecnológico, algún dispositivo o gadget.
¿Tenés algún proyecto que involucre Argentina?
¡El banco de junco! Mi objetivo es producirlo en Argentina, aprovechando la gran producción de junco y para tratar de ayudar a la gran comunidad que vive gracias a él en el Delta del Parana, en Tigre.
Fotos: gentileza Joaquín Sansone.
Más información: purodiseno.lat