Atelier Scale, un estudio de arquitectura con sede en Los Ángeles, materializó en China este parque infantil pensado para que los chicos exploren a partir del sentido del tacto y busquen nuevas maneras de juego.
Los diseñadores buscan motivarlos para que se apropien del lugar desde formas no tradicionales o esperables. Por ejemplo, incursionando en el plegado, como si cada superficie fuera un origami.
Nada de lo que sucede en el parque está definido completamente de antemano: los chicos pueden establecer su propio sentido lúdico y explotarlo.
Pueden treparse, meterse por distintos túneles o jugar a las escondidas. No hay límites.
El parque está creado desde un enfoque modular, lo que permite que se vayan incorporando nuevas estructuras plegables con variaciones distintas. Optaron por combinar el amarillo con algunos tonos más neutros, para resaltar algunas zonas.
Todos los módulos están cubiertos de madera plástica, un material que tiene una apariencia similar al natural pero algunos especialistas la ponderan como más duradera.
En este caso, el estudio eligió una en un tono muy claro, de manera de transmitir un clima de calidez y seguridad.
Lo necesario para motivar a los chicos a incursionar y probar.